Evaluación
CEPE es un centro especializado en dar tratamiento a pacientes en donde se ha detectado la presencia de alguna problemática en el área de la personalidad. Brindamos diferentes modalidades de tratamiento, los cuales varían en intensidad, foco de intervención y profesionales que lo imparten. Para poder definir qué modalidad es la indicada para el paciente, se realiza un proceso de evaluación multidisciplinaria.
La evaluación comienza con una primera entrevista cuyo objetivo es realizar un diagnóstico diferencial determinando así, la presencia o no de una dificultad en la personalidad. Una vez establecido el diagnóstico de trastorno de personalidad, se realizan las sesiones de evaluación multidisciplinaria, instancia que tiene por objetivo evaluar en profundidad el tipo de problema de la personalidad y definir el nivel de funcionalidad del paciente. Además entrevistamos a su red de apoyo para identificar como podemos ayudar al paciente. Lo anterior se realiza en 9 sesiones (seis con el paciente y tres con la red de apoyo) efectuadas por psicólogo y terapeuta ocupacional. En aquellos casos en que el paciente se encuentra internado en alguna institución psiquiátrica se ofrece la posibilidad de realizar la evaluación multidisciplinaria en el lugar de internación. El objetivo de lo anterior es utilizar este tiempo de crisis para establecer con claridad cuál es el curso de acción (tipo de tratamiento) a seguir posterior al alta.
Al finalizar la evaluación se realiza una reunión de devolución, donde se entrega al paciente las conclusiones de la evaluación y la indicación terapéutica, es decir la modalidad de tratamiento adecuada para las necesidades de la persona consultante.
Todas las modalidades de tratamiento tienen los mismos objetivos generales, pero la indicación varía según la situación del paciente y sus características específicas. Los objetivos son: proveer de estructura que permita contener emocionalmente y organizar al paciente; favorecer el desarrollo de la motivación por ocupaciones tanto en lo que respecta a las áreas de interés como a las áreas productivas (trabajo y/o estudio); brindar al paciente herramientas que le permitan superar de mejor manera crisis emocionales y por ende disminuir la presencia de conductas de riesgo (consumo de alcohol, drogas, promiscuidad, riesgo vital, etc.) además de conductas auto agresivas (cortes, intentos de suicidio, etc.); favorecer la reflexión y el conocimiento de sí mismo; y facilitar la adherencia a tratamientos de menor intensidad que tienen como objetivos resolver la raíz de los problemas del paciente.